Puede sonar raro pero hay parejas que ya están casadas antes de casarse, que ya se han comprometido a respetarse, cuidarse y amarse mucho antes de pisar juntos un juzgado o una iglesia. Las personas que se entregan en cuerpo y alma a un proyecto común obtienen cualquier cosa que se propongan. Son capaces de derribar muros enormes, de mover montañas altísimas, de cruzar a nado mares embravecidos.  Ana&José son un claro ejemplo de superación constante. No importa cuál sea la meta que quieran conseguir ya que al final la alcanzarán. Estoy convencida de que gran parte de esa fuerza y energía la obtienen de Marcos, su hijo, tan lleno de magia y alegría, capaz de cargarle las pilas a cualquier persona con sólo una mirada.

Gracias Ana&José por ser como sois y por compartir tantas tardes de risas con nosotros.